viernes, noviembre 25, 2011

Esmeralda bajo la luna

Desnuda te meces entre mis brazos bajo una luna coronada de estrellas, desnudo nuestro lecho improvisado en la cima de mis dominios. Tu pelo nocturno y ser de esmeralda en rostro de niña obnubilada por las gerberas, tu interior ardiente me envuelve y me empapas con tu deseo. El viejo ritmo del instinto da a luz a nuestro canto: oda ancestral a la virtud de los placeres, sinfonía de risas y susurros ofrecida a las hadas noctámbulas por vos y yo, por el uno que formamos en nuestra unión. La noche se ruboriza ante tus gestos de mujer completa en aquel rostro de niña, insinuando el pronto arribo de quien rige en las horas de vigilia. La ciudad se despereza y te marchas, dejando olvidada una hoja de plata bajo mi almohada.

martes, noviembre 22, 2011

Camino con un Sol

El morro moja sus pies en la espuma del océano, sobre su empeine de arena blanca descansa un Sol: piel de pétalos y bronce, esencia de amapolas, sus cabellos como una hiedra serpenteante me atrapan y mis ojos se encuentran con la tinta al bajar por su espalda. Brilla y descansa ante mi, la observo desde el morro y el morro también observa: sus piernas me atraviesan, su música acaricia en suave brisa, mi mente dibuja sus pechos bajo mi lengua... el mar celebra su brillar en continua reverencia y ella brilla y descansa. Al bajar del morro me ve, su rostro se enfrenta al mío, húmedas perlas me saludan desde su sonreír. El beso sabe a cachaça fresca, a sal marina y abacaxí. Su mano en mi pecho enciende mi luz, y juntos brillamos siguiendo el camino que el morro y el mar observan.